CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Más allá de si la educación es formar o instruir a una persona, desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales, morales o cognitivas para determinado fin; una transmisión de sabidurías para quienes la reciben les sirva para resolver los problemas que se puedan presentar en sus respectivas vidas y así se conviertan en buenos ciudadanos como opinan unos… y también más allá de que la educación, como opinan otros, aunque sean menos, es una domesticación, para hacer dócil y tratable al natural áspero, codicioso y rebelde humano… estimado lector, la presente es debida a que el que la suscribe desea dar más publicidad… y hacer alguna reflexión… sobre una noticia que en pasado septiembre poca… y en algunos casos ninguna… difusión tuvo en los diversos medios de comunicación.

La ninguneada noticia informaba de lo siguiente: que “todo aquel que estudia en Estados Unidos adquiere, junto a su título universitario, una gran cantidad de deudas que muchos acarrean toda la vida”.