MÉXICO, D.F., 23 de junio (proceso).- En 2006 la gran falla de su estrategia fue confiarse y haber dejado sin vigilancia miles de casillas el día de la elección. Seis años después Ricardo Monreal, coordinador de la campaña de Andrés Manuel López Obrador, advierte que eso no volverá a ocurrir: asegura que con un “ejército” de más de 400 mil simpatizantes se cubrirán todas las casillas del país para evitar un fraude el próximo 1 de julio.
“La historia no se repetirá”, ha dicho el candidato de las izquierdas quien informó que hasta el pasado 31 de mayo se habían destinado 100 millones de pesos a la promoción y defensa del voto, de un total de 186 millones 209 mil 847 pesos que ha recibido para su campaña por parte del Movimiento Ciudadano y los partidos de la Revolución Democrática (PRD) y del Trabajo (PT).
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