CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un 95% de las veces que una persona ordenó determinada cantidad de pescado de la especie marlín en un establecimiento comercial o restaurante recibió atún aleta amarilla, y uno de cada cinco consumidores se llevaron o degustaron tiburón, reveló la organización Oceana México en su informe GatoXLiebre, una investigación sobre el fraude y sustitución en la comida del mar.
El estudio realizado en las ciudades de México, Mazatlán y Cancún arrojó que una de cada tres veces que los consumidores compraron alguna especie de pescado, recibieron generalmente otra de menor precio, una práctica que, según el reporte, no sólo afecta la economía de los consumidores y pescadores, también pone en riesgo la salud de los mares.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí