CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La periodista Lydia Cacho denunció este jueves “la incapacidad del Estado mexicano” para brindarle protección, luego de las amenazas que recibió y que la obligaron a desplazarse forzadamente.
Tras una resolución de Comité de Derechos Humanos de Naciones Unidas, se libraron órdenes de aprehensión contra diversos policías judiciales de los estados de Puebla y Quintana Roo, y también contra el exgobernador poblano Mario Marín, el exjefe policiaco Adolfo Karam y el empresario Kamel Nacif, quienes urdieron la detención y tortura de la escritora en 2005.
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