CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- El “Barrio Bravo” está en crisis: los locales exhiben las últimas camisetas clones de equipos de la Champions League –ya suspendida por la pandemia de coronavirus–, playeras polo multicolores de 120 pesos, perfumes de estilo francés, juguetes y tecnología chinas. Nada de eso encuentra clientes.
En épocas del covid-19 Tepito resiste. En las calles no se ve el acostumbrado bullicio ni se oye el efectivo de la compraventa de mercancía pirata. Pero entre la salsa, la cumbia sonidera y el acordeón se abre paso la voz de Marco Polo, que desde su negocio de micheladas dice a Proceso:
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí