SAN PEDRO TLANIXCO, Estado de México (Proceso).- Rey Pérez González fue prófugo más de tres lustros. Sin un lugar fijo para vivir, siempre escondiéndose, sin un trabajo permanente.
“Gracias a Dios nunca pudieron agarrarme, pero en los operativos que hicieron golpearon a mi papá y a mi mamá.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí