CIUDAD DE MÉXICO (apro).- De las 10 mil 398 cámaras y GPS instaladas en autobuses y microbuses de transporte público concesionado que circulan en la Ciudad de México, el gobierno capitalino sólo han recibido 177 alertas en lo que va del año, principalmente por robo a pasajero, agresiones y disturbios de personas en estado de ebriedad.
Ese es parte del resultado, hasta ahora, del programa Monitoreo Integral y Seguridad en el Transporte Público concesionado, que lleva 67% de avance general y cuyo fin es incrementar la seguridad de los pasajeros y mejorar el servicio de conductores y concesionarios, informó la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum.
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