Gloria Leticia Díaz
MEXICO, DF, 29 de junio (proceso).- Con los ojos cubiertos y las manos atadas al frente, Lilia Esther Priego fue obligada a permanecer hincada con la frente apoyada en una silla. En esa posición escuchó los sonidos de una cámara fotográfica.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí