MEXICO, DF, 18 de agosto (apro).- “Tenemos que poner un alto definitivo a la corrupción y a la impunidad. México no es un país de corruptos”, sentenció el senador del PRD, Miguel Barbosa, al rendir su informe como presidente de la Mesa Directiva del Senado.
En una ceremonia que fue más una pasarela de políticos integrantes del gabinete federal, gobernadores y titulares de otros organismos federales y no una rendición de cuentas, Barbosa recibió elogios, aplausos y el guiño del coordinador de la bancada del PRI, Emilio Gamboa Patrón, quien afirmó que con el senador poblano se “confirmó que la pluralidad política no es un obstáculo para construir y concretar grandes acuerdos”.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí