VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- Las relaciones de Arturo Núñez Jiménez y su paisano Andrés Manuel López, su gran aliado para alcanzar la gubernatura en 2012, están definitivamente rotas por la acusación de “traidor” que éste último ha lanzado al mandatario estatal por supuestamente coludirse con “la mafia del poder” para aplastar a Morena en la entidad.
“Agravios” que Núñez no responde por su investidura de gobernador, pero aclara que hubo mal cálculo de López Obrador al suponer que sería un gobernante “incondicional”, sin decisiones propias.
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