MÉXICO DF, (apro-cimac).- Durante los últimos nueve años Paulina Rodríguez, de 45 años, pasó ocho horas y media al día empacando cartuchos de tinta en la maquiladora Lexmark, en Ciudad Juárez, Chihuahua.

El saldo de todo ese tiempo laboral para Paulina fue la inflamación de sus manos y su despido injustificado el pasado 9 de diciembre por exigir seis pesos más a su paupérrimo salario diario de 98 pesos.