CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En respuesta a la campaña de desprestigio emprendida contra la representante de Freedom House, Mariclaire Acosta, funcionarios de Naciones Unidas exigieron al gobierno de Enrique Peña Nieto garantías de seguridad para la defensora, quien forma parte de un órgano consultivo de derechos humanos nombrado por el secretario general Ban Ki-Moon.
En un comunicado fechado en Ginebra, Lin Lim, presidenta de la Junta de Síndicos del Fondo de Contribuciones Voluntarias de las Naciones Unidas para la Cooperación Técnica en Materia de Derechos Humanos, a la que pertenece Acosta Urquidi, manifestó su alarma por la “serie de ataques verbales y amenazas” contra quien fuera subsecretaria de Derechos Humanos y Democracia de la Secretaría de Relaciones Exteriores en los primeros tres años de gobierno de Vicente Fox.
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