COMPUTACIÓN… CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El mercado de los sistemas operativos está dividido en sistemas propietarios, muchas veces de paga y los libres, de código abierto, que en general son gratuitos. Linux es un ejemplo de estos últimos y han salido -gracias precisamente a su apertura en el código- una serie de distribuciones, también denominadas “distros”, que contemplan nichos de mercado muy particulares.
Por ejemplo, la Raspberry Pi, una computadora que cuesta unos 35 dólares, tiene Raspbian, una distribución de Linux para procesadores ARM la cual está basada en Debian y que busca generar un entorno de cómputo dedicado al aprendizaje y a la enseñanza. Raspbian tiene una serie de paquetes ya preinstalados como lenguajes para aprender a programar, herramientas para interesar a los niños en la programación, etcétera.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí