CIUDAD DE MÉXICO (apro-cimac).- Cada año, cientos de mujeres emigran desde el estado de Sinaloa a Estados Unidos para trabajar hasta por 10 meses en la agricultura, pero María de los Ángeles Soto Cañedo lleva dos años sin ser reclutada.
La razón: hizo valer el sistema de justicia para exigir mejores condiciones laborales para ella y el resto de los trabajadores migrantes.
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