CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Las reacciones en Francia y en el mundo, luego de que un camión embistiera a una multitud que asistía a la celebración del Día de la Bastilla en la ciudad de Niza, acción que dejó un saldo de al menos 77 muertos y decenas de lesionados, coincidieron en condenar el hecho de violencia y deplorar la pérdida de vidas en el país europeo.
Luego de conocerse la tragedia el presidente francés François Hollande, quien se encontraba en Aviñón cuando se produjo el atentado, se ha trasladado con urgencia de vuelta a París para sumarse a la célula de crisis que se ha creado en el Ministerio de Interior, informó el Elíseo.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí