CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Al menos tres mandos del Ejército que fueron ascendidos por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador en la ceremonia por el 109 aniversario de la Revolución Mexicana están vinculados con casos de presunta corrupción, espionaje y violaciones a derechos humanos.
Se trata de Francisco Ortega Luna, relacionado con la cadena de mando en la masacre de Tlatlaya, quien fue promovido a general de brigada, y el general Pedro Almazán Cervantes, acusado de vínculos con las redes de narcotráfico en Guerrero, quien ahora encabeza la Guardia Nacional en Puebla.
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