BUENOS AIRES, Arg.- 20 de junio (proceso).- Alberto Nisman estaba parado frente al espejo del baño, con la cabeza levemente inclinada, cuando empuñó con las dos manos una pistola Bersa calibre .22, llevó el cañón a la sien derecha y apretó el gatillo.
Así lo sugiere el dictamen de mayoría de la junta de criminalistas abocada a explicar las circunstancias de la muerte del fiscal que investigaba el caso AMIA, un ataque terrorista antisemita ocurrido en Argentina en 1994, que dejó 85 personas muertas.
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