CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El Colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco halló una fosa clandestina en Teuchitlán, aproximadamente a una hora de Guadalajara, que operaba como un campo clandestino de adiestramiento criminal y exterminio; testimonios de una víctima que logró escapar, relatan cómo era la vida dentro del lugar.
El centro de reclutamiento estaba al interior del Rancho Izaguirre, donde se encontraron hornos crematorios, droga espolvoreada y objetos personales como ropa, mochilas, libretas, entre otros.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí