CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Un grupo de 150 migrantes apostados desde noviembre pasado en Tijuana, Baja California, se negó a abandonar el albergue La Bodega ubicado en el centro de la ciudad, aunque –admitieron– “de todos modos nos van a sacar”.

Los centroamericanos hicieron caso omiso a autoridades de la Policía Federal que pidieron desocupar el lugar por insalubre, pese a que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) colocó esta mañana sellos de clausura en el sitio y ordenó su cierre.