CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- Desde el corazón de Tierra Caliente, Michoacán, el sacerdote José Luis Segura Barragán sostiene que la entidad se ha convertido en un infierno. Y advierte: “Es un narcoestado” donde el crimen organizado gobierna y nada puede hacer el presidente Andrés Manuel López Obrador con su política de “abrazos y no balazos” para combatir al crimen organizado.
Las palabras del expárroco de la comunidad de La Ruana se sustentan en datos duros, como los del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, según los cuales durante la gestión de Silvano Aureoles el número de muertes violentas o accidentales se incrementó 137%.