XALAPA, Ver.– La Secretaría de Salud del estado enfrenta el mayor daño patrimonial que se conozca a la fecha, y se atribuye al gobierno del morenista Cuitláhuac García, quien prometió erradicar la corrupción heredada del sexenio de Javier Duarte, pero hizo todo lo contrario.
Durante su sexenio, los Servicios de Salud de Veracruz registraron un desvío de más de dos mil millones de pesos mediante un esquema recurrente: contratos por adjudicación directa, otorgados a empresas de reciente creación y proveedores vinculados a casos de corrupción.