CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- El cúmulo de males que mantienen agónico al PRD, que llegó a ser el puntal aglutinador más notable de la izquierda, un instituto político con fuerza creciente y comprometido con las causas sociales más importantes del país, sigue empujándolo hacia su muerte. Dos expresidentes de ese partido, Amalia García y Carlos Navarrete, realizan un crudo diagnóstico en el que advierten sobre ese peligro inminente que acecha al perredismo.
El proyecto partidario más importante que construyó la izquierda en su historia de casi un siglo, el PRD, enfrenta el peor desplome electoral desde que se fundó como partido, la quiebra financiera y el éxodo de liderazgos que lo tienen casi en el sepulcro.