CIUDAD DE MEXICO (proceso).- Antes de que se transformara en una movilización conservadora en las calles del país, el debate reciente sobre el matrimonio igualitario y la defensa de la “familia natural” se gestó en las cámaras del Congreso mexicano.
La trama se inició con la creación de la Comisión de la Familia y Desarrollo Humano en el Senado. Como una clara concesión a los grupos conservadores vinculados al Yunque, el senador panista José María Martínez, de Jalisco, presidió la comisión y la transformó desde 2014 en un instrumento para contrarrestar al “lobby gay y del aborto”, según sus propias declaraciones.