CHILPANCINGO, GRO, 3 de octubre (proceso).- Así como los comicios del 7 de junio reconfiguraron el mapa electoral en el estado de Guerrero, también se advierte una recomposición en la geografía del narco.
Algunos de los integrantes de la nueva LXI Legislatura y varios de los 81 alcaldes llegaron con señalamientos públicos sobre sus presuntos nexos con el narco. Y en Iguala, el priista Esteban Albarrán Mendoza nombró entre sus colaboradores a policías igualmente señalados por su eventual cercanía con las bandas criminales que operan en la zona.