MONTERREY, NL (apro).- Un total de 20 empresas procesadoras de caliza, conocidas como pedreras, fueron clausuradas por el gobierno de Nuevo León, lo que provocó la suspensión en un 90% de la producción total en el estado.
Luego de que durante la entrega de su Primer Informe de Gobierno al Congreso estatal el pasado jueves 13, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón anunció el cierre de estas factorías para contener la contaminación atmosférica en la zona metropolitana, la Secretaría de Desarrollo Sustentable de la entidad, que encabeza Roberto Russildi, procedió a imponer sellos de clausura.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí