CIUDAD DE MÉXICO (apro). – Margaret Ann Cirko, quien en marzo de 2020 tosió y escupió sobre comestibles en el supermercado Gerrity’s en Pensilvania, mientras gritaba que portaba el coronavirus, fue sentenciada a entre uno y dos años de cárcel, ocho de libertad condicional y a pagar 30 mil dólares para resarcir el daño.
En junio pasado, la mujer de 37 años se declaró culpable de un delito grave: proferir amenazas de bomba y se disculpó ante la corte este martes, informó USA Today.
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