DIEGO RIVERA, RETRATO CUBISTA

MÉXICO, D.F., 20 de agosto (proceso).- Yo tengo en mi despacho mi retrato cubista, pintado por Diego María Rivera, y cada vez noto que me parezco más a él, y sin embargo me parezco menos cada vez a una mascarilla que me hicieron sobre mi mismo rostro, enterrado en yeso como un muerto, durante un cuarto de hora.
¡Éstas son las paradojas del arte burlándose de la propia realidad! ¡Viva el novirretratismo!


Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí