CIUDAD DE MÉXICO (Proceso).- La ruptura entre el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya Austin, y sus antiguos colaboradores en esa dependencia mantiene en vilo las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) contra una decena de exlegisladores del PAN y del PRI acusados por el exfuncionario de recibir presuntos sobornos a cambio de aprobar la reforma energética en el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Ante las desavenencias de Lozoya con Rodrigo Arteaga Santoyo, su secretario particular en Pemex, y Francisco Olascoaga Rodríguez, su director de Administración, ambos testigos se negaron a rendir su declaración ministerial y a aportar las evidencias, que presuntamente incluyen videos y recibos de las presuntas entregas de dinero por más de 80 millones de pesos a los legisladores.
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