TOLUCA, Edomex. (apro).- El Ejido de San Buenaventura, ubicado en la capital mexiquense, reclamó el pago de 300 millones de pesos más actualizaciones por la afectación de 96 mil metros cuadrados que fueron empleados para las obras del Tren Interurbano México-Toluca.
Acompañado por algunos de los 283 ejidatarios afectados, Edgar Ocampo, asesor jurídico del núcleo agrario, además solicitó al presidente Andrés Manuel López Obrador que sean cesados e investigados por presunto fraude exfuncionarios (algunos todavía en funciones) de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y del Sistema Ferroviario y Multimodal.
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