MONTERREY, NL (apro).- Luego de que se conociera el caso de la niña Ana Lizbeth, de 8 años, asesinada el pasado domingo por su secuestrador, un pederasta prófugo, el gobernador Jaime Rodríguez Calderón insistió en que sea instaurada la pena de muerte para quienes incurran en crímenes similares a aquél.
“El Bronco” dijo que ya tiene planeada una reunión con los diputados locales y federales electos de Nuevo León para que, al iniciar sus nuevas legislaturas, impulsen este tema desde sus curules.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí