EL PAÍS DE LA BARBARIE

MÉXICO, D.F., 6 de agosto (proceso).- Con la equivocada estrategia para enfrentar al crimen organizado, al parejo del reiterativo pero ineficaz discurso gubernamental sobre la necesidad imperiosa de militarizar el país, se ha tejido una densa cortina de humo que opaca problemas verdaderamente preocupantes. Entre otros están las crisis económicas que se avecinan por efecto de la recesión en Estados Unidos, y la caída de los niveles de nuestro desarrollo.
Durante las últimas dos décadas, después de dos perdidas, los niveles de crecimiento, productividad y desarrollo económico y social han decrecido de manera absoluta. El más importante indicador es la caída de los niveles de inversión del capital público y privado, que está provocando altas tasas de improductividad, el crecimiento del desempleo, el abandono de millones de jóvenes en pleno potencial transformador, la falta de crecimiento y calidad en el sistema educativo, junto con el virtual abandono de las tareas científicas y de producción de conocimientos.


Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí