CIUDAD DE MÉXICO (proceso).- El artista Rafael Cauduro abrió su casa y su estudio de Cuernavaca a Proceso para mostrar su mundo. Concertada la entrevista por teléfono con su asistente Gabriela Cavazos –quien solicitó enviar un cuestionario previo porque el pintor, desde hace unos años, está imposibilitado del habla–, la visita, gracias a su equipo de trabajo, resultó una experiencia reveladora: trasmitió su rechazo a la etiqueta de “hiperrealista”, de sus temas fundamentales, de sus obras en Los Pinos, de su obsesión por la justicia…
Su representante Liliana Pérez Cano dijo: “Cuando representa a una figura humana en una de sus obras, no implica que sea la realidad, sino la huella, un fantasma que pudo haber dejado en ese momento”.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí