URUAPAN, Mich. (apro).- La muerte a balazos de dos habitantes de la comunidad indígena de Capácuaro, presuntamente a manos de policías, desencadenó un bloqueo y la quema de al menos tres vehículos sobre la carretera Carapan-Playa Azul, así como una protesta frente a las oficinas de la Procuraduría local.

Por ello, tanto la policía municipal como la estatal y federal, además de Protección Civil, se mantenían en alerta, mientras el fiscal regional Hugo Verduzco informó que se encontraba en curso el inicio de las investigaciones para deslindar responsabilidades, tras la muerte de ambos comuneros (entre ellos un menor de edad), así como otro más lesionado, al igual que un policía herido y al menos dos pobladores detenidos.