CIUDAD DE MÉXICO (apro).– España le quitó la nacionalidad a 78 bebés que fueron inscritos como españoles mediante un fraude, pues eran, mayoritariamente, hijos de madres marroquíes y fueron inscritos en el Registro Civil de Melilla por españoles que declaraban falsamente ser los padres, informó El País.
Todos los niños son hijos de madres marroquíes que entraron en la ciudad autónoma para dar a luz en el Hospital Comarcal, donde una red delictiva ahora desarticulada buscaba a hombres de nacionalidad española para que, a cambio de dinero, inscribieran a los recién nacidos como hijos suyos en el Registro Civil, para convertirlos automáticamente en compatriotas con derechos y facilitar la residencia a las madres.
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