AJEDREZ
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Mijaíl Tal, el “mago de Riga”, fue un ajedrecista excepcional. Su percepción del ajedrez era impresionante en su momento, pues veía lejos, calculaba como un monstruo y encontraba sacrificios inesperados que dejaban al rival en la incertidumbre de aceptarlos o no, cosa que no se sabía a ciencia cierta qué era mejor.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí