CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA) denunció que a seis años del desastre ecológico ocasionado por el derrame de desechos tóxicos de la mina Buenavista del Cobre –propiedad de Grupo México–, en los ríos Sonora y Bacanuchi, la empresa no ha resarcido los daños y sigue siendo beneficiaria de proyectos del gobierno.
La agrupación civil acusó que, a pesar del cambio de gobierno y de las expectativas e ilusiones que generó la llamada Cuarta Transformación, la empresa de Germán Larrea Mota Velasco no ha sido emplazada por el presidente Andrés Manuel López Obrador a entregar cuentas y sí, en cambio, se le ha autorizado para construir una nueva presa de jales en Bacanuchi y un acueducto de 11 kilómetros de extensión para llevar agua desde la Caballera hasta las instalaciones de Grupo México.
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