HIDALGO (apro).- Con detenciones arbitrarias, golpes, gases lacrimógenos y encapsulamiento en contra de manifestantes culminó la jornada de protesta con motivo del 8M en Pachuca, Hidalgo, frente a la sede del Poder Ejecutivo del estado, que había sido previamente blindado.
La movilización masiva en el primer cuadro de la capital se había llevado a cabo de forma pacífica, con contingentes que encabezaron madres buscadoras, familiares de víctimas de feminicidio y desapariciones, así como colectivas, activistas, estudiantes, madres, niñas y adolescentes que, entre sus consignas, pedían justicia por casos impunes, además de portar pancartas con imágenes y nombres de mujeres víctimas de violencia.
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