CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En la delegación Cuauhtémoc, que alberga las sedes del Poder Ejecutivo, el Senado y la jefatura de gobierno de la capital del país, existen más de 700 predios invadidos por grupos delincuenciales que los usan para cometer robo, extorsión, narcomenudeo y trata de personas, entre otros crímenes.
La situación se agrava porque esas agrupaciones operan “bajo el amparo de autoridades y líderes políticos” que les filtran información del Registro Público de la Propiedad y de Comercio –dependiente de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales— sobre predios e inmuebles deshabitados, en litigio o irregulares. Así, los delincuentes “forman grupos de choque y con uso de violencia se apropian del lugar”.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí