MÉRIDA, Yuc. (apro).- Aun con el amparo que un juez federal le concedió a I.M.E.C., un chico de diez años con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), para que pudiera reincorporarse a su escuela sin ser discriminado, su representante legal Mirna Cortés sostuvo que el menor no puede volver porque “su vida corre peligro” en tanto no sea destituida la directora y parte del personal del plantel involucrado en la queja por maltrato.
Apelando a su derecho de réplica, la abogada refutó el contenido del reportaje que bajo la autoría de esta corresponsal difundió el portal Proceso.com el pasado sábado 7 respecto al caso, y afirmó que aunque I.M.E.C, en efecto, tiene diagnóstico de TDAH, “su condición no lo hace violento”.
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