CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El príncipe William negó que la familia real británica sea racista como aseguró Meghan, la esposa de su hermano menor, Harry, en una entrevista concedida a Oprah Winfrey el domingo último.

Y es que, a decir de la todavía duquesa de Sussex, un miembro no identificado de la realeza había cuestionado cuán negra sería la piel de su hijo Archie, lo que sumió a la monarquía británica en la peor crisis desde la muerte, en 1997, de la princesa Diana, madre de Guillermo y Enrique.