CIUDAD DE MÉXICO (apro).— El dueño de Nacional de Drogas (Nadro) Pablo Escandón Cusi evadió responder sobre la operación que realizó su esposa Marina Matarazzo, a través de la firma panameña Mossack Fonseca para adquirir Marzam.
Después de asistir al seminario Lograr el crecimiento incluyente en México, en el que Escandón Cusi estaba programado para participar como panelista de la mesa “Transformando los programas de salud en oportunidades para el crecimiento incluyente de México”, el también miembro del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios (CMHN) se negó a dar una declaración al reportero Enrique Hernández de la revista Forbes y a este reportero de la agencia apro.
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