XALAPA, Ver.-(apro).- Las bancadas del Partido Acción Nacional (PAN) y la de Morena llegaron a un acuerdo para que los simpatizantes de Morena desmontaran el campamento que habían instalado en el Congreso local y que ya llevaba cuatro días, a cambio de que la Junta de Coordinación Política –integrada por mayoría panista-, retirará de la última sesión extraordinaria la desincorporación de bienes estatales para darlos en comodato o donación a Ayuntamientos panistas.
Tras haber intercambiado insultos de “caprichosos”, “autoritarios”, “radicales”, “gandallas gubernamentales”, “saqueadores” e “ignorantes”, entre otros adjetivos que diputados panistas y morenistas se vertieron a través de la prensa, hoy lograron conciliar y retomar la actividad legislativa a solo cuatro días de que concluya la actual administración parlamentaría.
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