México, DF (apro).- Yahya Jammeh, presidente autoritario de Gambia desde un golpe de Estado que llevó a cabo en 1994, proclamó su país como “Estado Islámico”, el cual “respetará los derechos de los ciudadanos”, sin detallar cómo se traducirá este anuncio en hechos concretos, pues el político tiene un historial de declaraciones estrambóticas, entre ellas que sus poderes le permiten curar el sida.
En julio pasado, Jammeh aseveró que “sólo Dios puede determinar cuánto tiempo puede quedarse uno en el poder”, y declaró que asumió la presidencia contra su voluntad y “por amor por (su) madre”, en una entrevista que concedió al periódico New African.
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