CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Carlos Castillo Peraza lo describió de una manera descarnada: Felipe Calderón es “inescrupuloso, mezquino, desleal a principios y a personas”. Su mentor político lo conocía muy bien y supo de su naturaleza cuando resistió sus desdenes y maltratos que al final llevaron a una ruptura que Julio Scherer García escribió en su libro “Secuestrados”.
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