TOLUCA, Edomex (apro).– Con un Estado de México líder nacional en incidencia delictiva, Alejandro Gómez Sánchez presentó su renuncia como fiscal general de Justicia dos años antes de concluir su gestión, bajo el argumento de haber experimentado gran desgaste personal, físico y emocional al permanecer en el cargo alrededor de ocho años.

Durante ese plazo, el Estado de México se mantuvo a la cabeza en incidencia delictiva, como se desprende de los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.