CIUDAD DE MÉXICO (apro).– Militares y policías de Bolivia reprimieron este jueves una marcha en La Paz en la que habitantes de la ciudad de El Alto cargaban los féretros con los cadáveres de cinco de las ocho personas fallecidos el miércoles en los enfrentamientos en la localidad de Senkata.
Los manifestantes marcharon desde El Alto, ubicada a unos 20 kilómetros de La Paz, para exigir justicia por las víctimas y la renuncia de la presidenta interina, Jeanine Añez.
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