CHILPANCINGO, Gro. (apro).-Tras el asesinato del alcalde Alejandro Arcos Catalán, 280 efectivos del ejército y de la Guardia Nacional (GN) fueron desplegados en Chilpancingo para inhibir a la delincuencia organizada.
Está estrategia se ha anunciado en anteriores episodios de violencia en Chilpancingo y Acapulco sin que logre contener la violencia criminal.
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