WASHINGTON (apro).-El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca tras derrotar en los comicios presidenciales a la demócrata Kamala Harris, vaticina una complicada relación bilateral con México sustentada en las presiones que ejercerá el otra vez mandatario.
En su discurso de victoria durante la madrugada de este miércoles, Trump puso sobre la mesa se intención de sellar la frontera de su país que colinda con México, que aunque no dijo como lo hará, se anticipa la continuidad a la construcción de un muro y la militarización.
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