UNA ILUSIÓN EFÍMERA

LONDRES, 3 de agosto (apro).- El gobierno de coalición del primer ministro conservador David Cameron, que atraviesa una de las peores crisis económicas desde la Segunda Guerra Mundial, busca beneficiarse política y financieramente con los Juegos Olímpicos.
Cameron espera que la fiesta deportiva mejore su alicaída imagen y, al mismo tiempo, impulse una rápida recuperación económica de Gran Bretaña, que actualmente tiene un índice de desempleo de 8.4% y un déficit presupuestario de al menos 120 mil millones de libras (casi dos billones y medio de pesos).


Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí