Entre la basura y la sequía
MEXICO, DF, 7 de enero (proceso).- Si existe todavía la Ciudad de México y no ha sido devorada por el monstruo tentacular y proliferante que llamamos DF, algo extraño sucede con ella. Cambia todos los días al punto de que en enero de 2012 es diferente a como fue en diciembre de 2011. Y sin embargo, al leer sobre ella, un texto del ayer más remoto parece tan actual como el periódico y los medios electrónicos de hoy.
Adquiere una fotografía para ilustrar esta nota aquí